Solicitar ante la COMISIÓN DE DERECHOS ECONÓMICOS, SOCIALES, CULTURALES Y AMBIENTALES la necesidad de incorporar a la legislación la protección de los recursos naturales del país como patrimonio genético. Es fundamental regular el acceso a las especies nativas y endémicas del país, pues constituyen la base de un desarrollo sustentable, actual y futuro. En esta misma línea es necesario incorporar a la nueva constitución la regulación de los eventuales beneficios derivados de la investigación, desarrollo y/o innovación de dichas especies o de alguno de sus componentes. Otros países con alta biodiversidad han incorporado normas de esta índole en sus respectivas cartas fundamentales. Aunque Chile ha firmado y ratificado el acuerdo de la Convención de Diversidad Biológica (o CBD, por sus siglas en inglés) de Naciones Unidas, y es ley de la República desde 1998, hasta la fecha nuestro país no está cumpliendo las metas comprometidas en cuanto a asegurar la conservación de la biodiversidad mediante su protección y la regulación al acceso a los recursos genéticos, aunque es mandatorio para los países firmantes.
En resumen, es indispensable incrementar la investigación de especies nativas, en forma preferencial de aquellas que son endémicas de nuestro territorio y asegurar su conservación in situ y ex situ. Se conoce muy poco de la mayoría de nuestras especies nativas y endémicas, ya sea a nivel ecológico, fisiológico, bioquímico o genético, y también a nivel agro-productivo. El conjunto de este conocimiento constituye información invaluable como germoplasma que debe ser reconocido y protegido como país, así como resguardado frente a la bioprospección no autorizada y/o la biopiratería. También es indispensable incorporar normas y protocolos de acceso a nuestros recursos, dado que incluso la información genética tiene un gran valor por sí misma. Finalmente, esta es la oportunidad para asegurar que los beneficios derivados de nuestra naturaleza retornen al país y a las comunidades de origen, asegurando su distribución justa y simétrica.
Es fundamental que Chile se abra a la discusión de estas materias, pues esta información es clave para el desarrollo de una economía sustentable y basada en el conocimiento, en vez de una economía basada en un extractivismo primitivo o basal de materias primas sin valor agregado. Esta es la razón por la que estos conceptos y esta discusión deben ser parte de la deliberación en torno a la nueva constitución y deben tener rango de materia o derecho constitucional que regule en forma explícita el resguardo de los recursos genéticos nativos, asegurando el acceso justo y equitativo a los beneficios que deriven de su utilización. En palabras simples, el tema del conocimiento, acceso y retribución de beneficios en torno al uso de la riqueza que emana de la conservación de la biodiversidad, es lo que definirá el tipo de sociedad que seremos en el futuro muy próximo. |