Me gustaría conversar acerca del impacto que han experimentado por décadas, varias comunidades de la etnia Mapuche en la localidad de Coñaripe. Respecto de la interrupción, intervención y explotación comercial mal intencionada de terrenos que ancestralmente han sido sagrados para las comunidades, en donde se emplazan sitios ceremoniales de Gillatue y Cementerio, lugares de alta significación cultural y espiritual para los involucrados. Gran parte de los terrenos colindantes fueron adquiridos por un particular astuto y codicioso de manera bastante capciosa, el cual ha loteado y vendido estos terrenos como parcelas de agrado. Como si esto fuera poco, algunas de estas parcelas que son ocupadas por el y su familia tienen una gran cantidad de construcciones (galpones, casas, cabañas, establos, etc...) lo que transforma el entorno del Gillatue y Cementerío en un Villorrio sin respeto a lo espiritual ni tampoco a ningún plan regulador.
Las comunidades han presentado ante la Conadi, la solicitud de recuperación de estos terrenos a través del la ley reivindicación de tierras del artículo 20 letra b de la ley 19253, esto lleva mas de 20 años de iteración.
Yo soy una parte impactada como Chilena, descendiente de etnia Indígena Diaguita, que empatizo y comparto lo que han sufrido las comunidades con todo este abuso del comprador y loteador, quien ha actuado al amparo del apoyo de Abogados, Notarios y otras autoridades que deberían resguardar y garantizar que se actúe apegado a derecho.
Esta situación además me afecta, ya que el loteador de forma poco transparente me vendió una de estas parcelas, él sabiendo de la vigencia de este conflicto. Yo al enterarme y entender que no puedo hacer uso de la misma, hable con la comunidad y no me queda mas que apoyar la causa de que estos terrenos sean adquiridos por la Conadi y cedidos a las Comunidades Involucradas. |