Audiencias - Año 2021 - Nicolás Duhalde - Audiencia AO001AW1039742

Información General

Asistentes

Nombre completo	Calidad	Trabaja para	Representa a
José Illanes	Gestor de intereses		José Antonio Illanes Grau

Materias tratadas

Elaboración, dictación, modificación, denegación o rechazo de actos administrativos, proyectos de ley y leyes y también de las decisiones que tomen los sujetos pasivos.

Especificación materia tratada

De acuerdo a lo conversado telefónicamente con Paola Arriagada, vengo en solicitar formalmente que se fije una nueva fecha para la audiencia lobby N° 1021430, a la cual no pude asistir por motivos ajenos a mi control. A continuación transcribo la solicitud original: Exponerle al Subsecretario las irregularidades cometidas en el Hospital San Borja en la realización de la auditoría realizada por la muerte de don Héctor Fernando Rivera Urra, ex funcionario de dicha institución, producto de un actuar negligente del cirujano Claudio Navarrete García, en la realización de un ERCP. En la auditoría en cuestión, el auditor, dr. Emiliano Soto, realizó un trabajo muy deficiente, al punto tal que ni siquiera conocía ni tenía nociones de quiénes habían sido los médicos que habían participado en el procedimiento. Pese a haber acreditado lo anterior, el actual director del Hospital, dr. Raúl Quintanilla, encontrándose en conocimiento de dichas irregularidades, ha optado por desentenderse de la situación y pasarlas por alto, sin ni siquiera escuchar a la familia del sr. Rivera, negándose de plano a revisar la auditoría y mucho menos a repetirla. Todo lo anterior en connivencia con Jorge Wilhelm, Director del Servicio de Salud Metropolitano Central, quien anteriormente era el Director del Hospital San Borja cuando ocurrió la muerte del paciente en agosto de 2020, quien en un principio se comprometió personalmente con la familia del paciente a realizar la auditoría y a entregarnos los resultados. Lamentablemente, lo anterior no ocurrió, incumpliendo Jorge Wilhelm con su propia palabra, dejando de responder los correos y los llamados telefónicos de los familiares y mostrando nula preocupación en orden a entregar los resultados de la auditoría a la familia. Finalmente, la familia en el mes de agosto de este año, cuando había pasado un año del fallecimiento del paciente, tuvo que contactarse directamente con el auditor del Hospital para lograr que los resultados fueran entregados, ya que la misma secretaria de Jorge Wilhelm (Pilar Rivera) lisa y llanamente dejó de dar respuestas a los innumerables correos electrónicos enviados por los familiares del sr. Rivera, y el Director Wilhelm, pese a haberse comprometido personalmente, no fue capaz de cumplir con su palabra. Para peor, la auditoría fue absolutamente deficiente, evidenciando el auditor una total y completa ignorancia en aspectos básicos y sustanciales del procedimiento, como por ejemplo la cantidad de anestesiólogos que habían participado en este, para peor, cuando se le hizo presente dicha discordancia se limitó a señalar irónicamente: “parece que vimos fichas clínicas distintas”. Además, cada vez que al auditor como familia le consultamos por aspectos técnicos (como por ejemplo criterios de alta aplicados, elección del lugar y fecha, etc.), sus respuestas consistían en divagaciones sin ningún sentido, que no guardaban ninguna relación con la auditoría, llegando incluso al punto de sugerir que había sido responsabilidad del paciente el alta médica. Lo anterior porque carecía de la imparcialidad necesaria para realizar una auditoría de este tipo, ya que señaló varias veces conocer al dr. Navarrete hace muchos años, incluso a mí me había señalado anteriormente que le constaba “lo mucho que el dr. Navarrete se preocupa de sus pacientes”. Por tanto, evidentemente el dr. Soto carecía de la imparcialidad requerida para realizar una auditoría de este tipo. Por tanto, en razón de lo anterior, habiendo agotado todas las instancias de contacto con el Director del Hospital San Borja, y no habiendo obtenido respuesta alguna, y, habiendo agotado a su vez todas las instancias con el Director del Servicio de Salud Metropolitano Central, con los mismos resultados, no me queda más alternativa que recurrir al Subsecretario de Redes Asistenciales, para exponerle las irregularidades y solicitarle que la auditoría se vuelva a realizar, ojalá por un auditor externo al Hospital San Borja, para que dicho procedimiento quede bien hecho y se puedan obtener los resultados esperables, así como también exponerle las demás irregularidades detectadas en relación al Hospital San Borja. REUNIÓN REALIZADA